Para una inmersión total en la vida local, opte por un apartamento o un albergue. Estos alojamientos le sumergirán en el cálido ambiente de los pueblos pirenaicos, donde cada piedra cuenta una historia. Tanto si elige un piso moderno como una posada tradicional, siempreestará cerca de las rutas de senderismo y de los tesoros naturales de la región. Es la oportunidad perfecta para vivir a su ritmo, con acceso a los mercados locales y a las especialidades gastronómicas por las que la región es famosa.
A los amantes de la naturaleza les encantarán los campings enclavados en el corazón de paisajes impresionantes. Tanto si viene en tienda de campaña como en caravana o autocaravana, estos emplazamientos ofrecen el lujo de despertarse con la vista puesta en las montañas. Para vivir una experiencia aún más única, déjese tentar por alojamientos insólitos. Dormir en una yurta, un tipi o una casa en un árbol es una aventura en sí misma, un interludio encantado donde reconectar con lo esencial.