Entre Navidad y Año Nuevo, tuvimos unos días libres y decidimos hacer una escapada a los Pirineos. Es cierto que está cerca de casa (a 1h30 de Toulouse) y, sin embargo, atrapados en nuestra vida cotidiana, rara vez nos tomamos el tiempo de escaparnos. Con este invierno especialmente suave, esquiar se ha vuelto más complicado, pero hemos descubierto que la montaña está llena de otras actividades.
Sophie y yo aprovechamos para conocer mejor la región y visitar sus pepitas: Saint-Bertrand-de-Comminges Valcabrère y Luchon, la Reina de los Pirineos. Estos lugares cuentan con una rica historia y unos paisajes impresionantes, perfectos para viajeros como nosotros que buscan autenticidad y descubrimiento.
Es aquí, al pie de las montañas, donde comienza nuestra escapada cultural, en el corazón de la majestuosa ciudad de Saint-Bertrand-de-Comminges, una auténtica joya medieval. Catalogada como uno de los pueblos más bellos de Francia, la ciudad nos transporta a través de los siglos. En lo alto de la ciudad, la catedral Sainte-Marie se alza orgullosa, ofreciendo una vista ininterrumpida sobre el valle. Esta obra maestra del gótico, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es una visita obligada en la ruta de peregrinación a Santiago de Compostela. Entramos y admiramos su órgano renacentista, uno de los mejores órganos clásicos de Europa, que resuena durante el famoso Festival du Comminges. Por último, junto a la catedral, visitamos el claustro y disfrutamos de una magnífica vista de los Pirineos.
A poca distancia, nuestro itinerario continúa en Valcabrère con la basílica de Saint-Just, otro tesoro arquitectónico. Este pueblo, antiguo emplazamiento de Lugdunum Convenarum, alberga los vestigios de un pasado glorioso. Las termas romanas, el antiguo teatro y la capilla de Saint-Julien son testigos de esta época. Paseamos por las murallas. Sophie se enamoró del encanto de las casas con entramado de madera que cuentan la historia de esta ciudad polifacética.
Para el resto de nuestra estancia, nos dirigimos a Luchon,«La Reina de los Pirineos«, con su reputación de siempre, ¡para disfrutar de otro tipo de nieve! La estación de esquí de Luchon-Superbagnères, directamente accesible desde Luchon por el Crémaillère Express, ofrece un panorama excepcional de las cumbres pirenaicas. Pero Luchon también es conocida por su ambiente de la Belle Époque y su patrimonio termal. No se aburrirá con las numerosas actividades y excursiones que se le ofrecen. Por supuesto, probamos las famosas termas y descubrimos el vaporarium, único en Europa. La Allée d’Étigny, bordeada de plátanos centenarios, invita a pasear, con su arquitectura atrevida y sus eventos culturales. Pasamos una agradable velada romántica en el teatro y luego en el casino. No ganamos nada milagroso, pero nos reímos mucho.
Como puede ver, Luchon nos encantó. Volveremos este verano para asistir a la Fiesta de las Flores, que atrae cada año a numerosos visitantes. Nuestro anfitrión también nos recomendó magníficos paseos por el Valle del Lys, con la Cascada de Enfer y el Lago de Oô. Los valles de Pique, Oueil y Larboust prometen momentos inolvidables. Para una experiencia más espiritual y contemplativa, tenemos previsto seguir la ruta de Santiago de Compostela y descubrir elHospiciode Francia, punto de partida del Port de Vénasque y el circo de la Glère.
Para los amantes del senderismo, la Vía Garona es el medio perfecto para descubrir estas joyas. Este sendero de gran recorrido une Toulouse con Saint-Bertrand-de-Comminges, con sus impresionantes paisajes y sus pintorescos pueblos.
Cuando visitamos la región pirenaica de Alto Garona, descubrimos un joyero de naturaleza y cultura. Los Grands Sites Occitanie Sud de France, Saint-Bertrand-de-Comminges y Luchon, ofrecen un panorama único de la historia y el patrimonio de la región, así como un sinfín de actividades para disfrutar todo el año. Ya sea amante del arte, de la historia o de la naturaleza, estos sitios le prometen una inmersión total en un universo intemporal.
Venga a descubrir una región que deleita los sentidos, tanto en verano como en invierno. Los Pirineos del Alto Garona le esperan para revelarle sus secretos mejor guardados. Sophie ya está planeando nuestro próximo viaje. ¿Le apetece acompañarnos?
